El Centro de Capacitación Misional México (CCM) luce en todo su esplendor este mes de julio de 2016 con la reciente llegada de más de doscientos élderes y hermanas, sonrientes y ansiosos por empezar su servicio misional en México, Chile, Argentina y otros países, incluyendo los Estados Unidos de Norteamérica.
Con esta recepción el CCM alcanzará una población de más de 825 misioneros, un número fácil de hospedar en lo que fuera el Centro Escolar Benemérito de las Américas hasta 2013; el cual mide aproximadamente 90 hectáreas y es el centro de capacitación misional más grande de América Latina. Es verdaderamente un oasis en medio de la bulliciosa capital de México. Se respira un gran espíritu de paz en el CCM, sin duda debido a su dedicación formal, así como por los esfuerzos consagrados de miembros y misioneros de la Iglesia.
El nuevo director del CCM, Nicolás Castañeda, comentó: 'Es verdaderamente una maravillosa experiencia espiritual el contemplar los misioneros llenos de fe y su deseo de aprender a fin de estar listos para salir y compartir el mensaje del evangelio de Jesucristo. Todo un equipo de operaciones y capacitación da su mejor esfuerzo para contribuir a que los misioneros salgan de este lugar con la Doctrina de Cristo ardiendo en su corazón y cumplan su sagrado propósito misional. En el CCM México nos sentimos sumamente agradecidos por la confianza que el Señor nos otorga, estamos preparados para recibirlos y enviarlos de aquí a diferentes misiones en varios países a donde se les ha llamado a servir”.
Un equipo de 250 personas aproximadamente, trabajan arduamente para atender las necesidades de cada uno de los misioneros y concentrarse en su preparación misional. Lo anterior se hizo evidente con la llegada de los élderes y hermanas, quienes fueron atendidos con rapidez y eficiencia. Felicidades a la excelente presidencia, misioneros, empleados y voluntarios.
La Presidencia del CCM, comparte lo siguiente, 'Como Presidencia, estamos agradecidos por la oportunidad de trabajar y servir a tantos maravillosos hombres y mujeres jóvenes. Nos traen mucha alegría y felicidad. Nuestro trabajo en el CCM es apoyado por quince Presidencias de Rama maravillosas, cinco parejas de misioneros mayores, y todos los que trabajan sin descanso para atender las necesidades de estos jóvenes.'